martes, 25 de noviembre de 2014

La liberación femenina a través del látex de un condón

Empiezo por hacer una simple y básica pregunta: ¿Es normal que una mujer cargue un preservativo en su cartera, tal y como fuera su brillo labial?, personalmente pensaría que sí, no le veo ningún misterio ni tabú al tema, es mas, creo que ya es tan común ese fenómeno, pues en la actualidad las mujeres hemos decidido ser quienes tomemos las riendas de nuestra propia vida sexual. 

Aunque puede que el tema yo no lo considere tabú, sí soy consciente que en la actualidad, todavía hay mucha mojigatería en el aire. Para nadie es un secreto, que entre las mujeres es mucho más fácil hablar de sexo, pues somos más abiertas al tema, lo tratamos sin tapujos, sin temores; somos descriptivas en los detalles, llegando a ser hasta un poco morbosas en nuestras conversaciones; sin embargo, cuando el tema es tratado frente al género masculino, la mayoría de las veces aparece la doble moral, ese silencio incomodo que logra evadir el tema, para evitar de esa manera el cliché de la "chica fácil".  

Mientras viví en Buenos Aires, les pregunté a varios amigos sobre el tema; pues allí era muy común ver a las chicas siempre cargar con su kit personal, el cual estaba guardado en una carterita pequeña en donde siempre había un par de condones, pues nunca se sabia en que podía parar una buena noche de fiesta. El resultado a esa simple pregunta a mis amigos hombre y algunas mujeres también, fue muy variado; pero la gran mayoría de los hombres no le veían problema al asunto, pues entendían que el sexo es algo que compete a las dos personas que están participando del encuentro y que es completamente válido que las mujeres carguen el preservativo y exijan su uso; pero del otro lado tanto hombre como mujeres mostraron su lado "conservador" aduciendo que ese tipo de actitudes llevar a concluir que una mujer que lleve dentro de su bolso o que en su mesa de noche tenga siempre un condón, es una "chica fácil", pues esa actitud demuestra que es una mujer que sólo piensa y desea encuentros sexuales.  

Yo por mi parte, defiendo esta iniciativa, la veo como algo muy normal, pues parto de la premisa que si una mujer toma pastillas anticonceptivas como un mecanismo de protección personal y sexual, porqué no podría entonces cargar un preservativo en su cartera o tenerlo guardado en su cajonera, como un método de prevención frente al contagio de la ETS. No creo entonces que aquellas mujeres que decidan cargar con un condón al alcance de su mano sean “chicas fáciles”, por el contrario yo las considero mujeres maduras, responsables y respetuosas de sí mismas y de su pareja; es mas yo hago parte de ese grupo de mujeres que compran pastillas anticonceptivas no como un método de planificación familiar, sino también que lo hago por un tema de salud y por lo mismo compro condones en el mercado, para tenerlos al alcance de mi mano en caso de necesitarlos.
Soy de las que piensa que una mujer precavida vale por dos, no le veo ningún problema a que las mujeres vayamos al supermercado o farmacia y compremos unos condones normales, tal como si estuviéramos comprando una caja de chicles, o un brillo labial; para mi son elementos de venta libre, entonces yo porque no los puedo comprar y cargar en mi cartera o guardar en mi cajonera. 

No le encuentro problema alguno a esa decisión e iniciativa de protegerme en mi vida sexual, por el contrario defiendo a aquellas mujeres de armas tomar, que participan activamente en las decisiones que conciernen al sexo y que por ello deciden protegerse y cuidarse a si mismas y a su pareja.